Conspiranoias

En relacion a la entrada que publique anteriormente "obras son amores", hoy he podido enterarme que muchos vecinos se han molestado con el alcalde de Alacuas, Jorge Alarte, los afectados realizaron una recogida de firmas que fue entregada en el consistorio, formalizando una protesta en relacion a unas obras en el municipio, que a todas luces era una "pifia", el alcalde en su celo decidio enviar una carta a todos y cada uno de los firmantes de la queja, esta visto que el alcalde se toma en serio lo que sus convecinos le dicen, manifestandoles su preocupacion y la pronta resolucion del problema, pero lejos de calmar los animos, como digo, muchos han visto un posible acoso, intimidacion o invasion de su intimidad, sin mas datos que los leidos en el diario, parece que las "conspiranoias" estan a la orden del dia, ¿ seran contagiosas ?, me temo que si, es el efecto de la histeria colectiva, cuando una sociedad es metida por algunos ideologos de forma artificiosa en una espiral visceral de descredito de las instituciones, los valores individuales, los derechos humanos, la libertad de pensamiento, el progresismo y culpando, con argumentos y problemas peregrinos, irreales, inexistentes o cuanto menos achacandoles de todo mal a los que ostentan legitimamente esos deberes, dandoles el rango de destructores y usurpadores de una sociedad que curiosamente los ha elegido por mayoria, al tiempo que se alzan ellos como unica alternativa, los despropositos van creciendo, afectando a todo desde lo mas nimio hasta lo mas importante, en una situacion que solo lleva a una escalada de tierra quemada, para una vez que un politico escucha a los ciudadanos, se le acusa de actuar de "Gran Hermano" y no me refiero al cutre-programa televisivo, sino a la novela de George Orwell, "1984".
Esta situacion y discurso se repite ciclicamente, siempre que los mas reaccionarios, retrogrados, saca cuartos y antidemocratas, son privados ironicamente por los propios ciudadanos de forma legitima, cinicamente se autoproclaman los unicos y verdaderos valedores del pueblo, precisamente aquellos que los han quitado de ese deber.
Dios nos salve de los salva-patrias.